Kevin Garnett./ Getty Images
La semana pasada salieron a la luz los uniformes que vestirán los jugadores presentes en el All-Star Game 2014. Como era de esperar, es un modelo como el que estamos acostumbrados a ver últimamente, una camiseta con mangas. Desde el comienzo de esta temporada, la NBA ha aprovechado las fechas importantes del calendario, para vestir a los jugadores con este nuevo diseño. El día de San Patricio, el Día de Navidad y ahora el acontecimiento más destacado del año en la Liga, el Fin de Semana de las Estrellas.
Al contrario de lo que mucha gente piensa, estas camisetas se están vendiendo muy bien en todo el mundo, entre personas de todas las edades. La marcaAdidas afirmó recientemente que están superando las expectativas de ventas. Para entender el éxito de este nuevo producto, hay que ser consciente de que mucha gente las consume para vestir, no para jugar al baloncesto. Por mucho que moleste a los defensores del modelo tradicional, el marketing es el marketing y si la NBA amplia las ganancias con las nuevas camisetas, ¿Por qué no iba a imponer su uso? No sería de extrañar que, más pronto que tarde, todos los equipos jueguen con este nuevo diseño, dejando a un lado una de las marcas distintivas del baloncesto, los tirantes.
Además del apartado estético, lo que más preocupación provoca es si estas camisetas entorpecen el juego. LeBron James se manifestó recientemente con respecto a este tema, diciendo que no puede tener a sus tiradores ahí fuera preocupados por las mangas de las camisetas. Chris Grancio, directivo de Adidas, defendió el nuevo diseño diciendo que “hemos hecho múltiples pruebas a los jugadores y el nuevo modelo no tiene absolutamente ningún impacto en ellos”. Nuestro compañero de Basket4US Antonio Gil habló recientemente conMirza Teletovic sobre este tema y el jugador de Brooklyn Nets quitó hierro al asunto. “No hay diferencia entre unas y otras. En realidad entrenamos siempre con camisetas de manga corta”.
Un reportaje publicado por bleacherreport.com, recoge la opinión anónima de varios jugadores de la Liga. Muchos de ellos declaran que, simplemente, es una decisión de la NBA para ganar más dinero, y que ellos no tienen ni voz ni voto en el asunto. Muchos añaden también que llevan desde la universidad jugando con camisetas interiores de manga corta y que están acostumbrados a entrenar en la NBA con estas mismas camisetas. Otros, afirman que no se sienten cómodos teniendo que aceptar este nuevo modelo y que es igual que si estuvieran diciéndoles que zapatillas tienen que usar.
A pesar de estas tímidas quejas, los jugadores son profesionales del deporte y, los que no estuvieran acostumbrados ya, no tendrán más remedio que hacerlo rápidamente a este nuevo modelo, que como muchos dicen, no es tan diferente al tradicional. En definitiva, los protagonistas del espectáculo, miran para otro lado, asumiendo que no es una decisión suya y que el objetivo de la NBA es ganar más dinero. Teniendo en cuenta toda esta información, el principal problema que presenta el nuevo diseño, es que un porcentaje de los aficionados y de los jugadores opina que es feo. Esto no es, ni mucho menos, suficiente razón para que la NBA retroceda en su carrera por introducir las mangas en el baloncesto.

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